Voluntario dos horas al día para atender la Biblioteca de Vilamartín
- Amancio Delgado Álvarez ayuda a mantener vivo el espacio de lectura, imparte también talleres y afirma que colaborar es un modo de ayudar a dinamizar el municipio
Amancio Delgado Álvarez, vecino de Portela (Vilamartín), atiende dos horas al día la Biblioteca municipal de Vilamartín como voluntario desde hace nueve meses, simplemente con el objetivo de colaborar con la institución local y ayudar a dinamizar la localidad. Es un voluntario que ejerce al mismo tiempo como “dinamizador cultural” convirtiendo la Biblioteca de Vilamartín en un espacio vivo.
¿Por qué se hizo voluntario y realiza esta tarea desinteresada en el Concello?
Siempre trabajé con libros, me gusta, trabajé en el mundo de la autoedición en distintas empresas y también en el campo de informática, en Madrid y Bilbao, entre otras ciudades. Creo que ser voluntario es una forma de colaborar con el municipio y sus vecinos. Dentro de la Biblioteca de Vilamartín he realizado algún taller en los últimos meses como el de encuadernación de libros.
¿Qué destacaría de la biblioteca de Vilamartín?
La Biblioteca es el núcleo neurológico de la vida cultural de un pueblo ya que durante siglos hemos ido acumulando conocimiento de nuestros antepasados en los libros y en esta biblioteca, aún cuando es pequeña, me he encontrado un fondo de libros muy interesante desde antologías a otros manuales. Además, las instalaciones cuentan con internet. A mí lo que más me apasiona de internet es la wikipedia , una biblioteca mundial al alcance de cualquiera y, por supuesto, desde la Biblioteca de Vilamartín hay internet gratuito, con ordenadores y “wifi”, una gran ventaja impensable hace años y que abre muchas posibilidades. Con una biblioteca tan bien equipada es fácil motivar a la gente para que lea y la utilice.
¿Cuenta con muchos usuarios o la afición a la lectura cuesta?
Lógicamente, va gente, pero no tanta como me gustaría. Como ocurre en todas partes, los libros y la lectura sigue siendo una asignatura pendiente pues no terminamos de convencernos de los muchos valores que aporta la lectura a parte también del placer directo que proporciona leer. Leer es también una forma de escuchar.
¿Hay algún proyecto o taller inmediato para la Biblioteca de Vilamartín?
En principio, se está barajando la posibilidad de realizar un taller de papiroflexia para los niños pues es una actividad muy positiva, posiblemente dentro del programa de verano de “Vilaverán”.
Ha diseñado “Inxertarte”, la feria que complementó la Festa das Covas de Vilamartín, ¿qué valoración hace?
La idea era muy ambiciosa, más amplia, si bien para el comienzo estuvo muy bien. Hubo apartados que no pudieron realizarse pero que es factible en otras ediciones futuras como que la gente sacase a la calle y expusiese objetos antiguos que tuviesen en sus casas. He visto que hay un campo de acción importante y se me ha ocurrido que estaría bien promover la restauración de piezas antiguas que están en bodegas, o viviendas, tiradas en una esquina, llenas de polvo. Sería bonito empezar a perfilar un taller de restauración, que podría ser una actividad interesante, si bien eso ya dependería del Concello.