Si venimos de Sada, tomaremos a la izquierda en la rotonda de San Isidro para incorporarnos a la carretera que une A Coruña con Ferrol. Justo antes de llegar al Puente del Pedrido nos desviaremos a la derecha y a una distancia de 1,3 kilometros llegaremos al Pazo. Desde Betanzos, tomaremos la carretera que va a Bergondo y al encontar la autopista veremos señalizado el desvio a la derecha, la distancia desde la ciudad betanceira hasta Mariñan es de unos 5 kilometros.
Puente del Pedrido
El Pazo de Mariñan, antes conocido como Pazo de Láncara, es una construcción barroca del siglo XVIII edificado sobre los restos de una fortaleza levantada por Gonzalo Perez das Mariñas con motivo de la llamada Guerra de los Irmandiños en el siglo XV. Sus jardines son de inspiración francesa y está ubicado en la margen izquierda del Río Mandeo, en las marismas que originan la Ría de Betanzos.
Entrada al Pazo
La propiedad del lugar fue pasando de padres a hijos hasta llegar a su último propietario Gerardo Bermúdez de Castro y Suárez Deza, Señor de Láncara, quien murió el año 1936 sin descendencia legando la propiedad a la Diputación de A Coruña.
Como muchas de estas mansiones también tiene su historia negra, pues entre estas paredes uno de sus propietarios, Luis de Pimentel y Soutomaior, perpetró el fallido asesinato de su esposa Inés de Rabaneira.
A la construcción original se añadieron otras salas anexas que sirven de aulas y residencia para los participantes en los seminarios y cursos que en la actualidad se organizan. También se ha utilizado como residencia de personalidades extranjeras que visitan oficialmente Galicia.
Patio de Armas
En este espacio se han desarrollado algunas exposiciones y desfiles de moda, en ellas las modelos han lucido sus galas posando en la bella escalinata de manpostería que da acceso al Pazo por su entrada principal.
Elementos decorativos de la escalinata
Escalinata de la parte posterior que da acceso a los jardines.
Paseando por los bellos y cuidados jardines uno se siente invadido por una agradable sensación de paz y tranquilidad y el transcurrir del tiempo deja de ser importante.
Junto a imponentes eucaliptos, árboles de distintas especies y procedencias jalonan los paseos.
El Río Mandeo y sus marismas añaden belleza y un paisaje bucólico al Pazo.
Las rosas despuntan en los rosales, altaneras, como orgullosas de su belleza, mientras se asoman a la ría.
No podía faltar en este entorno un detalle presente en cualquier lugar de Galicia, un bello Cruceiro con Jesucristo descendido de la Cruz por sus dos seguidores, mientras la Virgen María les contempla.
El Pazo de Mariñan fue declarado Monumento Historíco Artistíco en el año 1972 y es uno de los grandes atractivos de esta zona de Las Mariñas coruñesas. Allí uno puede perderse para reencontrarse consigo mismo, envuelto en la calma y belleza de ese entorno.