Balance de ‘El tiempo’ en Galicia 2021

  • El año 2021 fue seco y cálido en Galicia, que suma ya nueve anualidades consecutivas con temperaturas medias más altas del habitual
  • El avance del informe climatológico anual de Meteogalicia concluye que en las estaciones gallegas más representativas se registró una anomalía positiva de 0,32 grados
  • Febrero, abril y diciembre de 2021 fueron meses climáticamente muy cálidos, mientras que el único que se puede caracterizar como muy frío fue enero
  • Con relación a las precipitaciones inscritas en la Comunidad, fue un año seco aunque hubo grandes contrastes, con períodos muy húmedos, como los de febrero y junio, y otros muy secos, en el caso de los meses de marzo y de noviembre

 

El año 2021 se caracterizó en Galicia por ser un período seco y cálido desde el punto de vista climatológico. De hecho, la temperatura media inscrita fue de 13,93 grados, lo que supone una anomalía positiva de 0,32 grados con respeto al valor esperado, la misma tendencia detectada en la Comunidad durante los últimos nueve años.

Estas son las principales conclusiones del resumen del informe climatológico de 2021 elaborado por Meteogalicia a partir de los datos de las estaciones más representativas de la Comunidad así como de su evolución, considerando el período de referencia 1981-2010.

En lo que respeta al comportamiento de las temperaturas, el año fue cálido en su conjunto aunque con bastantes contrastes si se analiza el comportamiento de cada mes. En este sentido, febrero, abril y diciembre fueron meses muy cálidos, mientras que el único que se puede caracterizar como muy frío fue lo de enero.

Así, la tónica general en el caso de abril y diciembre fue el predominio del tiempo anticiclónico, mientras que en febrero la razón de que fuese más cálido de lo esperado se debió al paso por Galicia de sucesivas frentes con viento del sudoeste que trajeron asociado masas de aire tibio y muchas nubes.

Por el contrario, el único mes tipificado como muy frío fue el de enero, algo que se debió, principalmente, a las bajas temperaturas que caracterizaron los primeros 15 días del período, durante los que hubo varios avisos de nivel naranja por bajas temperaturas, sobre todo en la provincia de Ourense.

Nueve años cálidos consecutivos

La explicación al hecho de que, en su conjunto, el año pasado pueda considerarse cálido en Galicia hay que buscarla tanto en las temperaturas mínimas —con una anomalía positiva de 0,33 grados respeto del habitual— como en las máximas —que también acabaron el año con valores medios cálidos, 0,30 grados por encima del esperado—.

En cualquiera caso, no son datos extraordinarios ya que 2020 presentó una temperatura media bastante más alta que la de 2021 —por encima de los 14,5 ºC— y la tendencia a registrar años más cálidos del normal en Galicia se mantiene de forma constante desde 2013.

Precipitación media

Según los datos de precipitaciones recogidos en las estaciones meteorológicas más representativas de la Comunidad, en los últimos 12 meses el volumen de lluvias inscritas fue menor del esperado, por lo que 2021 debe considerarse, en general, un año seco. En total la precipitación media en Galicia para la serie regional fue de 1.206 L/m2, lo que significa que llovió un 6% menos del que cabría esperar.

No fue, en todo caso, un período excepcionalmente anómalo en cuanto a las lluvias y, de hecho, no hay que remontarse muy atrás para encontrar un precedente más seco, ya que en 2017 el déficit hídrico en la Comunidad gallega fue del 24%.

Aun así y al igual que ocurrió en el caso de las temperaturas, el comportamiento de 2021 presentó notables contrastes entre unos meses y otros. De este modo, hubo períodos muy húmedos, como fue el caso de febrero y junio, y otros muy secos, concretamente marzo y noviembre.

El paso continuo de sucesivas borrascas en el que respeta al mes de febrero, y una segunda mitad de junio caracterizada por episodios de inestabilidad, que dejaron aire frío y lluvias muy cuantiosas, explican que ambos habían sido períodos muy húmedos.

Por el contrario, el predominio del tiempo anticiclónico durante casi todo marzo y una tónica muy similar en noviembre explican que ambos períodos del año pasado habían finalizado con pocas jornadas de lluvia y una pluviosidad escasa, por lo que se consideran meses muy secos.

También te podría gustar...