Ampliado hasta el 15 de octubre el plazo para pedir ayudas para la compra de viviendas en cascos históricos
- La convocatoria de este año está dotada con un presupuesto total de 600.000 euros
- El importe de la subvención oscila entre los 10.800 y los 15.000 euros por vivienda, dependiendo de su emplazamiento y de la edad que tenga el adquirente
La Consellería de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda acaba de ampliar hasta el 15 de octubre el plazo para la presentación de solicitud de ayuda para la adquisición de viviendas en cascos históricos, según la resolución del Instituto Galego da Vivenda e Solo publicada hoy en el Diario Oficial de Galicia.
La convocatoria se publicó el pasado 15 de marzo, con una dotación de 600.000 euros, y según las bases, los beneficiarios podrán optar a una ayuda de hasta 15.000 euros para financiar la adquisición de una vivienda ya construida (nueva, usada o que necesite rehabilitación) en uno de los cerca de 50 cascos históricos existentes en Galicia y que están relacionados en la orden de la Consellería de Hacienda publicada en el DOG del 13/3/2018.
Podrán solicitar esta subvención las personas que con posterioridad a 1 de enero de este año suscribieran un contrato privado o firmaran escritura pública de adquisición de una vivienda cuyo precio no supere el máximo establecido en la convocatoria. Los ingresos de los solicitantes no podrán superar 6,5 veces el Iprem (48.877,33 euros), lo que permitiría optar a estas ayudas a casi el 90% de los hogares gallegos.
El importe máximo previsto de 15.000 euros se aplicará si la vivienda está localizada en un Área Rexurbe —actualmente sólo los municipios de Mondoñedo, A Coruña y Ribadavia cuentan con esta figura—. En el resto de casos a ayuda será de hasta 12.800 euros por vivienda si el adquirente es menor de 35 años y de hasta 10.800 cuando el beneficiario supere esta edad.
Hace falta recordar que estas ayudas se enmarcan en el Pacto Social por la Vivienda 2021-2025, una hoja de ruta consensuada con los principales colectivos profesionales implicados en el sector y con las asociaciones de consumidores con el objetivo de llegar en este período la unas 70.000 familias gallegas.