Teatro Corsario lleva a escena a una Teresa de Jesús creíble y humana
Teresa, miserere gozoso es el último montaje de Teatro Corsario, que gira en torno a Teresa de Jesús a partir de un texto escrito y dirigido por Luis Miguel García, uno de los históricos componentes de esta compañía vallisoletana. La función llega al Bergidum el próximo sábado, 31 de octubre (21 horas), dentro del abono de otoño y de la programación de la Red de Teatros de Castilla y León.
Tras más de tres décadas de existencia, Teatro Corsario es, sin duda, el gran referente del teatro en Castilla y León y una de las compañías históricas del teatro español. En esta ocasión se enfrenta al reto de llevar a escena a Teresa de Jesús, persona y personaje a la que sitúan en su contexto histórico.
En aquella sociedad, que una mujer escribiera era, de por sí, una audacia. Teresa de Jesús aparece en constante refriega contra los ortodoxos y se opone al concepto de honra como un sistema que ahoga a los excluidos. En Teresa, corporeidad y afectividad van unidas: «Oscura fe que abrasa con su luz la oscura carne». Tras una terrible enfermedad que la lleva a las puertas de la muerte, y de la cual regresa, comienza la representación como un renacimiento. «¡Cuánta belleza, profunda, clara y ágil! ¡Cuánto talento, cuánta verdad y honestidad en la puesta en escena!», ha dicho la crítica.
Rosa Manzano, Julio Lázaro, Cristina Calleja, Pilar San José, Jesús Peña y la cantante Consuelo Bravo integran el reparto de este montaje, que cuenta con la música de Juan Carlos Martín.
La crítica ha señalado que los actores «se desenvuelven muy bien en escena, con movimientos mínimos que permiten que el texto mantenga al espectador atento y concentrado en el escenario. La temperatura de la obra sube cuando aparece la voz maravillosa de Jesús Peña, ese Laurence Olivier que vive en Valladolid. Rosa Manzano dibuja una Teresa de Jesús creíble, con poderío y pinceladas de humor. Porque a su personaje le gusta ocultarse, no enseña nada de buenas a primeras, vive en contradicción»
La obra muestra claramente la lucha de una mujer, vehemente y apasionada, por llevar a cabo una misión contra viento y marea y es «un canto optimista que muestra el periplo vital de Teresa de Ávila, un personaje desconocido para el gran público, una mujer en continua lucha consigo misma y con una sociedad monolítica y jerarquizada, en la que no se veía con buenos ojos a las mujeres que leían y, mucho menos, que escribían, que pensaban por sí mismas».