Peludines Callejeros: «Estamos muy preocupados por el ‘plan de control de colonias de gatos’ en O Barco de Valdeorras»
- A raíz de la última Comisión de Medio Ambiente del Ayuntamiento de O Barco de Valdeorras, las reacciones y la preocupación no se han hecho esperar
En dicha comisión, se informaba de trabajos que se comenzarán a realizar en el municipio con el objeto de reducir las colonias de gatos callejeros. Se dio a conocer que existen tres en zona urbana (Plaza Das Airas, Porto da Abarca y en el aparcamiento de una zona comercial de O Malecón). Será en las que más se trabaje aunque también se manifestó que hay más pero no tan numerosas.
Las medidas, según el consistorio, se aplicarán para velar por la salud de los vecinos de la zona, asegurando que una de ellas ya aportó partes médicos.
Se pondrá un bando explicativo recordando la ordenanza. El dar alimentos a los animales supondrá una sanción. También se pondrán jaulas para capturarlos para acto seguido trasladados a la Perrera de Valdeorras donde se les castrará y desparasitará. Por último solicitaron la colaboración ciudadana para tal fin.
El resultado de la comisión no ha pasado desapercibido por la Protectora Animal de Valdeorras A.P.A.V ( Peludines callejeros) que ya ha emitido un comunicado
Desde la Protectora Animal de Valdeorras A.P.A.V,( Peludines Callejeros), mostramos nuestra preocupación por el futuro de las colonias de gatos de O Barco de Valdeorras, tras las declaraciones leídas en prensa del equipo de gobierno de dicho Ayuntamiento.
Nuestra Asociación, junto a otras asociaciones de protección animal, voluntarios y vecinos indignados por este,¨plan de control de colonias» nos informaremos de los detalles no citados en dichas declaraciones y que nos crean serias dudas referentes al futuro de estos animales.
El destino incierto de los que no volverán a las calles, también es motivo de sospecha.
Castrar y devolver a su entorno, sirve de poco si se les prohíbe alimentar, ya que eso no es controlar una colonia,si no condenarla a morir de hambre en nuestras calles y obligar a estos animales a buscar comida en basuras y casas .
Tampoco así se controlan las infectaciones de pulgas que tanto preocupan, ni otros parásitos, pues una vez devueltos a la calle, hay que seguir desparasitándolos para evitar precisamente las pulgas.
Solicitamos pues, que ayuden en la medida que puedan tanto económicamente, cómo facilitando el trabajo de voluntarios y se dote de carnets de cuidadores de colonias a esas personas, para que ellos, suministren alimento seco a estos animales, y los cuiden,tanto con desparasitaciones, como castraciones y búsquedas de hogares .
Confiamos en la buena fe del Ayuntamiento y les pedimos que, así cómo han escuchado la queja de una vecina, escuchen las quejas de los vecinos que se preocupan por todos los habitantes del municipio, sean animales o personas.
También pedimos que si tanto les preocupa la salubridad del municipio, escuchen las quejas desoídas de vecinos aquejados por azufre en sus calles, cosa totalmente ilegal, y persigan y multen a quienes incumplan esa ley.
Así cómo tampoco olviden, las muertes recientes de algunos animales domésticos en el Malecón, envenenados por sólo el contacto en piel de pesticida, ya que eso sí es un peligro también para la población y el responsable sigue libre.
Hacemos mención también, a la queja de vecinos sobre el estado insalubre de la zona destinada a perros, al otro lado del río y que imaginamos, sea competencia del Ayuntamiento, o que se cree un ZEC (Zona de Esparcimiento Canino), amplio, vallado y en buenas condiciones, donde puedan soltarse los perros, y no arriesgar a sus dueños a más multas, por no ir con cadena en algunos lugares del municipio.
Invitamos al equipo de gobierno a una reflexión sobre la palabra ¨humanidad¨ y la apliquen en su plan de trabajo diario ,y que conozcan cómo otros ayuntamientos han controlado las colonias de gatos y a cambio estos les mantienen lejos a roedores y otros animales. Todos pagamos impuestos y la gente que se preocupa por los animales tambien merecen ser escuchados.
Prohibir no es la solución, involucrarse sí