Los jabalíes y corzos, pero también gusanos, pájaros y conejos reducen cada año la producción de uva entre un 5 y un 20 por ciento en Valdeorras
- En los últimos días los jabalíes se comieron los primeros brotes de algunos viñedos de A Rúa y ya es habitual el “ataque” al fruto en semanas previas a la vendimia
Los jabalíes y los corzos se dieron un “banquete” en los últimos días con los primeros brotes de algunos viñedos de A Rúa, algo que se ha convertido en un problema habitual pues se registra año tras año. Estos animales, junto con los gusanos, pájaros y conejos reducen anualmente la producción de uva entre un 5 y un 20 por ciento en la comarca de Valdeorras, porcentaje que puede llegar a superarse dependiendo de la incidencia y población de la citada fauna. Así lo atestiguan viticultores del municipio de A Rúa afectados en las últimas semanas por la “visita” de los corzos a sus viñedos. Detallan que las zonas más afectadas son aquellas próximas a montes de San Xulián como Pedrazais, Trasdeirelas y Rozas, si bien también otras como la parte superior del paraje conocido como Barquiño, sobre la N-120.
Aunque pueda parecer una anécdota, jabalíes y corzos llegan a constituir un serio problema para los viticultores, tanto como el impacto de la climatología y, de hecho, la tarea de espantarlos ha llevado a buena parte de ellos a cerrar los viñedos, instalar artilugios o, incluso, dormir a pie del viñedo . “Ocurre de forma puntual todos los años y afecta según los corzos y jabalíes tengan ganas de comer. Si comen cuatro uvas, no pasa nada. Pero puede ocurrir que se coman la mitad del viñedo”, exponen los viticultores afectados.
Si la primavera es la época en la que se inicia la amenaza de estos animales y los primeros daños, también lo es antes de la vendimia, entre julio y agosto, pues la uva está en el punto óptimo de maduración. “Los jabalíes y corzos entran en los viñedos, se comen las uvas y, además, seleccionan variedades. La Mencía es la favorita pues en esa fecha va más adelantada, tiene más azúcar y la devoran. Se comen esas y las otras variedades no”, esgrimen.
Pero también los gusanos, los pájaros y los conejos, dependiendo de la abundancia de estas especies en cada zona, se comen los brotes y frutos del viñedo. “No sólo la climatología afecta a los viñedos, sino también la fauna natural y, dependiendo de la buena o mala suerte, pueden llegar a causar problemas serios. Hay algún viticultor que no ha conseguido nunca la variedad Mencía porque todos los años es devorada por estos animales. Cuando había lobos se cumplía la cadena biológica alimenticia. Como no hay lobos, proliferan los corzos por todas partes. Pero es así, tenemos que convivir con dicho problema”, relatan.
Precisamente, la Xunta detalló en los últimos días, a raíz de la presentación de un plan de trabajo para evaluar los daños por los jabalíes, que ha habido una disminución de la población de corzos y jabalíes en Galicia, aunque reconoció que siguen existiendo zonas en las que es necesario actuar como Valdeorras y que dicho descenso es el resultado de, entre otras cosas, la autorización de batidas de jabalíes durante todo el año.